viernes, 1 de agosto de 2008

Fiscales, taxistas y pulgas.

Ayer nos enteramos que los fiscales valencianos gastan tres millones de euros al año en taxi. Supongo que recibirán un buen descuento en su condición de grandes clientes. También supimos que la pulga no les perdona, al menos en la sede de Alzira...
Lo cierto es que como pasa entre procuradores y abogados, los fiscales se asemejan al pariente pobre de los jueces y magistrados, ahora se anuncia que la Fiscalía abrirá cinco nueves sedes en la Comunidad Valenciana, en Sagunto, Vila Real, Paterna, Elda y Torrent.
"Solamente" quedarán como partido judicial sin fiscalía : Sueca, Mislata, Requena y San Vicente del Raspeig. Se aprecia el esfuerzo, aunque como se ve es insuficiente.
Lo cierto es que sin la decisiva intervención de los fiscales los juicios se suspenden, y la actividad jurisdiccional se resiente considerablemente. Son un elemento clave de la administración de justicia y merecen emplazamientos y sedes dignas en donde puedan realizar con soltura su trabajo, lo que para las arcas públicas es la mejor inversión, sin duda, no se trata de una cuestión baladí.